La millonaria familia del ex primer ministro británico fue criticada por no poder cubrir los gastos del transporte para la fiesta del niño de 11 años.
El ex primer ministro británico Tony Blair se ha ganado varios enemigos en los amigos de su hijo Leo de 11 años. Sucede que no siempre uno es invitado a una fiesta de cumpleaños en la mansión británica de un millonario como Blair, y cuando lo hacen, se espera que no le cobren a uno el pasaje.
Tony Blair hizo exactamente eso: invitó a los amigos de su hijo a una lujosa fiesta en una mansión valorizada en 6,7 millones de euros en una zona exclusiva Buckinghamshire al norte de Londres y, cuando entusiasmó a todos, les comunicó que le cobraría 10 libras (11,3 euros) a cada uno por el alquiler del autocar que los llevaría, según reveló el diario británico “Daily Mail”.
Los papás de los invitados no dudaron en expresar su incomodidad ante la situación. Que la familia de un ex primer ministro británico que gana más de 28 millones de euros al año cobre el pasaje para una fiesta de su hijo de 11 años no fue algo que agradó en el público.
“Estoy furiosa. Los Blair son ricos y se lo pueden permitir, pero muchas familias no tienen recursos”, dijo una de las madres de los chicos invitados. El autocar es la única forma de llegar a la mansión por motivos de seguridad. Sin pasaje no hay fiesta.
La sensación de malestar ante el cobro se generalizó entre los invitados al punto de que la familia Blair acordó con el director del colegio de su hijo que, “si alguna familia no podía pagar el coste del autocar, entonces ellos podían pagarlo”, según un portavoz del ex primer ministro.
Fuente: ElComercio
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