Murcia fue la primera comunidad del PP que dio esta distinción a la tauromaquia
Comienza a convertirse en norma. El PP declara los toros Bien de Interés Cultural (BIC) en cada comunidad en la que gobierna. También en las ciudad. La primera fue Murcia, en febrero de este año. Después se sumó Madrid. Valencia ha anunciado la intención de hacerlo antes de que termine el año.
Este jueves, Castilla-La Mancha anunció su decisión de dar este
tratamiento a los festejos taurinos. El Consejo de Gobierno de la región
argumentó que este espectáculo confluyen "los valores históricos,
artísticos y etnológicos que la hacen merecedora de la protección".
El
portavoz de la comunidad en que gobierna María Dolores de Cospedal,
Leandro Esteban, indicó que para tomar la decisión se basaban en los
informes técnicos que obran en el expediente que se ha redactado para el
efecto.
La declaración de un bien patrimonial como de Interés
Cultural es la máxima categoría de protección jurídica reconocida en la
legislación. Sin embargo, ninguna de las comunidades que ha adoptado
esta medida ha concretado cómo va a afectar a los festejos en su
territorio, si se va a fomentar mediante un plan concreto.
Esteban
incide en que con este paso, "queda garantizada su protección y
reconocimiento como hecho cultural propio de la máxima relevancia". Al
tiempo que recordó que la Ley del Patrimonio Histórico de Castilla-La
Mancha establece en su preámbulo que "atesora las experiencias
culturales que generaciones sucesivas han legado como testimonio de sus
inquietudes, y como estímulo para la creatividad contemporánea".
Según
una encuesta elaborada en 2007 y citada por el Ejecutivo regional, el
89 por ciento de los castellanomanchegos está de acuerdo con que la
fiesta de los toros forma parte de la cultura española y el 37 por
ciento acude al menos una vez al año a una plaza de toros a presenciar
un espectáculo taurino.
Castilla-La Mancha es una de las
comunidades autónomas con mayor número de corridas de toros y cuenta con
algunas de las ganaderías más señeras del campo bravo como son
Alcurrucén, Daniel Ruiz o Samuel Flores.
En el apartado económico,
según datos de 2009, se estima que los beneficios generados por las
actividades que giran en torno al mundo de los toros pueden rondar los
250 ó 300 millones de euros en Castilla-La Mancha. Sin embargo, se echa
en falta un estudio más profundo tanto de su incidencia en el aspecto
económico como en el ecológico de una manera más integral.
Fuente: ELPais
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domingo, 25 de diciembre de 2011
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